“Piensa en grande” es una de las conocidas frases de Donald Trump, el magnate millonario. Otra por la que se lo conoce es: “Estás despedido” y Trump resume un concepto uniendo las dos en una tercera:
“Si no quieres escuchar la segunda frase, tendrás que hacer caso a la primera. Si de todas formas tienes que pensar, piensa en grande”.
Personalmente coincido con su línea de pensamientos, es muy lógica y me gusta mucho, pero esto de “pensar en grande” requiere de una explicación un tanto más amplia y ciertas aclaraciones, para evitar malos entendidos que podrían hundir tu negocio, tu familia y tus finanzas.
Me gustaría ejemplificarte cómo interpretando de dos formas distintas la frase “piensa en grande”, una persona podría crear una gran empresa y otra caer en quiebra:
¿Realmente estás pensando en grande?
Felipe y Gerardo tienen varias cosas en común. Los dos saben bien lo que quieren: ser millonarios para ayudar a personas sin hogar, y aunque aún no saben cómo lograrlo tienen en claro que para alcanzar ese objetivo deberán “pensar en grande”.
Estos dos amigos alguna vez intentaron ser socios, pero se dieron cuenta que cada uno tenía su propia interpretación de esto de “pensar en grande”, por lo tanto, decidieron que cada uno desarrollaría su negocio por su lado.
Felipe y Gerardo tenían un amigo en común que les comentó:
“Una heladería es un gran negocio, estoy trabajando de cajero en una franquicia que vende más de 1.500 dólares diarios. Los dueños del negocio tienen mucho dinero, todos los años se van 3 meses de vacaciones con toda la familia”.
Felipe es un tanto más impulsivo que Gerardo y pensó “tengo toda la información que necesito, un gran sueño y el dato de un gran negocio, mi plan será conseguir el dinero para adquirir 3 franquicias de esa heladería e iniciar a lo grande, así lograré mi objetivo más rápidamente”.
Gerardo, en cambio, pensaba que tenía un gran sueño, pero no un gran plan que acompañara a ese gran sueño, además, sentía que le faltaba información del negocio de las heladerías y no se sentía del todo capacitado para llevar adelante un negocio de un rubro que desconocía. Por lo tanto, tomó una decisión: no entraría en este negocio, pero comenzaría a prepararse para manejar un gran negocio en el futuro.
Distintas formas de “pensar en grande”.
Felipe decidió hipotecar su casa para adquirir 3 franquicias de una heladería famosa, tal cual lo había planeado.
Gerardo, aunque había decidido no entrar en el negocio, como ejercicio, se puso a armar un plan de negocios más sofisticado que el “plan” de Felipe.
Al tener que empezar a investigar en profundidad algunos temas para obtener la información necesaria para volcarla en el plan de negocios, comenzó a darse cuenta de que algunas cosas no eran tan fáciles como parecían. Inclusive se enteró que los dueños de la heladería (en la que trabajaba el amigo que tenía en común con Felipe), se iban de vacaciones todos los años, pero tenían grandes deudas, su salud financiera pendía de un hilo y la vida que llevaban no era producto de buenas ganancias que diera la heladería, sino de una forma irresponsable de manejar sus finanzas, algo que no podía durar mucho tiempo.
También se dio cuenta que una franquicia de helados podía vender mucho, pero los costos eran grandes y la temporada corta, por lo tanto el margen de ganancia se achicaba. Además la mayoría de esas franquicia de helado, eran del tipo “cerrada”, lo que quería decir que no se podían hacer cambios de ningún tipo sin consultarle al proveedor de la franquicia. El “gran negocio” estaba iba quedando reducido a un local de poca ganancia sin muchas posibilidades.
No obstante, Gerardo siguió armando su plan de negocios y tratando de pensar de qué forma podría diferenciarse de la competencia. Además, se anotó en un curso de ventas, otro de marketing, otro de contabilidad básica y otro de liderazgo, lo que para su economía era todo un sacrificio, pero siempre le quedó grabada la frase:
“Si piensa que la educación es costosa, pruebe con la ignorancia”.
Pasado un tiempo, Felipe ya disponía de sus 3 franquicias de heladerías, pero administrarlas le estaba costando parte de su salud. Los números no estaban siendo de lo mejor y no estaba seguro si era un tema de pocas ventas, bajos márgenes de ganancia, si la competencia tenía mejores productos y precios o si su propio liderazgo y manejo del personal era el que estaba arruinándolo todo. Estaba inmerso en tantos problemas diarios que ya no disponía ni de tiempo para sacar conclusiones.
Hoy, mientras calculaba la suma de las cuotas retrasadas de la hipoteca recordaba el momento en que discutía con su esposa por hipotecar la casa y le reprochaba que “ella no pensaba en grande”.
¿Dónde está el negocio?
Gerardo estuvo tanto tiempo enfocado en conseguir información sobre heladerías, que hasta llegó a trabajar un verano completo todos los fines de semana, por una paga miserable, solo para conocer todos los secretos del negocio.
Los números contaban la historia: el gran negocio estaba en ser el fabricante del helado y dueño de las franquicias.
Después de pasar los últimos años estudiando un mismo negocio y trabajando en su crecimiento personal, se sentía en confianza como para hacerle una presentación del emprendimiento a su familia. Disponía de una planilla detallada con cada gasto y un estimado de ventas a lo largo de 5 años. Les explicó a cada uno de los miembros de su familia que el camino sería duro, pero que si todos colaboraban tenían grandes posibilidades de sacar adelante el negocio. Cada uno tendría una tarea específica y sería entrenado por él mismo.
La diferencia entre “pensar en grande” y pensar en grande.
Felipe en el transcurso de 3 veranos terminó endeudado, con una sola heladería que apenas cubría sus gastos y lo mantenía esclavizado todo el día. Su familia vivir al día y temerosa al desalojo de su propiedad.
La conclusión de Felipe era que “pensar en grande” no servía, era irreal.
Gerardo en cambio estaba feliz, las cosas marchaban bien, de a poco, pero todo muy firme. Los problemas eran los que había calculado y estaba aplicando todo lo que estuvo aprendiendo en estos años. Su conclusión era:
“Esto de pensar en grande es una excelente filosofía,
creo que en algunos años comenzaré a otorgar franquicias”.
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Muchos emprendedores cuentan que cuando iniciaron sus negocios comenzaron haciendo gastos completamente innecesarios por un tema de status, precipitaciones emocionales, o desconocimientos. Se enfocaron poco en las partes esenciales del negocio como las ventas, los números, el manejo del personal y el marketing y demasiado en aspectos superfluos como la oficina grande y la secretaria.
Gastar en grande no es sinónimo de pensar en grande así como tampoco lo es adquirir una gran deuda para iniciar un proyecto. Crear un mega negocio sin antes haber manejar uno pequeño no es pensar en grande. Se puede iniciar un pequeño proyecto y aun así estar estableciendo las bases de un gran negocio. Pensar en grande tiene mucho más que ver con la preparación del emprendedor que con lo que el negocio aparenta ser.
Donald Trump pasó años de su vida aprendiendo y preparándose antes de hacerse famoso por su frase “piensa en grande”.
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Te dejo un cordial saludo,
Martín Omar
gracias martin por tus publicaciones,, me sirven mucho de guia para mi trabajo
relacionando este tema con el libro padre rico padre pobre, felipe calló en la trampa que nos advierte una y otra vez el padre rico, EL MIEDO Y LA CODICIA, felipe reaccionó ante sus emociones en vez de pensar y manejar sus emociones con inteligencia.
mientras tanto gerardo tomó posesión de el activo mas valioso «el poder de la mente» , invertir en el mismo primero, a eso se le llama crear cimientos fuertes.
hay un gran dicho que dice: no trates de construir un muro, en vez de eso coloca un ladrillo de la forma mas perfecta en que se pueda colocar un ladrillo, y haz eso todo los dias….así es que se construye una gran muralla.
Gracias por este articulo martin.
GRACIAS POR CADA LECCION.
Muy buena la reflexion sobre pensar en grande. es la pequeña diferencia entre el exito y el fracaso.
es verdad, tampoco se le puede culpar a donald trump de irresponsable, todo lo que uno lee o escucha debe ser analizado cuidadosamente y poniéndole mucho sentido común, por ejm cuando robert habla de apalancamiento, hay que tener cuidado ahí también sobre como se interpreta
Saludos!
Hola martin soy yo de nuevo… gran articulo!!! Lamentablemente las cosas para mi no se dieron para que pueda experimentar con un plan de negocios antes de lanzarme del avion…. la oportunidad estaba ahi la toma o la dejaba asi de sencillo… como deduciras la tome cometi muchos de los gastos inenecesarios quizas no el de la secretaria pero si otros…. ya sali del tunel oscuro y ahora estoy trepando una empinada montaña se que alla en la cima habra un camino plano tal como nando en la pelicula «viven» que veia señales (flores, plantas) que pasando esa montaña encontrarian la salida de la cordilleara de los andes… yo igual veo muchisimas señales. (contactos que estoy haciendo).
Pero bueno lo que escribiste me hiso recuerdo a un caso que me cuando me entere me dejo helado… eran principios del año pasado y yo andaba buscando en que invertir un capital que tenia en aquella epoca entre mi madre y yo pensabamos ver la forma de invertir tanto ella como yo y veimaos muchas opciones entre esas opciones chocamos con un restaurante de comida oriental de mi país… el dueño de este restaurante estab buscando socios porque decia que queria poner mas restaurantes… la comida era buena… la infrestuctura muy buena pero gracias a lo que habia leido de kiyosaky yo sabia que eso no bastaba que la calidad del producto solo era la punta del iceberg asi que lleve aun amigo que conoci mas del rubro gastronomico, hable con el dueño al cual le pedi su plan de negocios (recordemos que que queria poner sucursales con el dinero que le dieramos) a lo cual me salio con evasibas eso ya me hizo desconfiar, pero de todas maneras mi madre fue a charlar con el… mi madre una persona con mucha experiencia y gran sabiduria me dijo que le parecia un estafador y luego se entero que tambien queria el del restaurant queria el dinero para comprar el terreno donde estaba el restaurant… mi madre me dijo que mas bien deberiamos buscar al dueño del terreno y tratar de compara el terreno ya que era una muy buena zona de la ciudad y el terreno era pequeño ( no servia para casa) por lo que el capital que teniamos muy probablemente nos alcanzaba… buscamos, investigamos mucho y no encontramos al dueño.
Paso mas de un año y mi madre me vino a contar que su amigo de promocion de colegio que lo vamos llamar «marcos» le conto todo apresumbrado que estaba pasando por una situacion dificil que si le ayudaba a llevar gente a su restaurant…. mi madre no se dio cuenta hasta su amigo le paso un volante que era el mismo restaunrante en el cual habias considerado invertir un año atras…. Mi madre apesumbrada le pregunto que comose habia metido en ese lugar y MARCOS le conto que habia llegado a ese lugar por un aviso del periodico que el dueño le habia hablado de un moviento de 15 mil dolares mes y que con eso el se habia entusiasmado… que el quiso saber mas pero que el estafador le pido 7 mil dolares de adelanto para mostrale los libros contables… luego dice que el estafador le empeso a dar un poco de utilidades y luego le pidio 8 mil mas para que lo deje participar en todo. Marcos le dio el auto como pago al estafador ( el lo maneja ahora) y finalmente no contento con eso el estafador queria que marcos se haga cargo del pago del alquiler del terreno del restaurante…. a lo que Marcos por fin reacciono y le metio jucio por subalquilar que en mi país es un delito. De esa manera fue que MARCOS logro quedarse temporalmente con el restaurante para que mediante lo que generara logarar recuperar lo que se le debia… pero se encontro con grandes problemas… en primer lugar los empleados se les debia sueldo asi que trabajaron un para de semanas mas y lo dejaron… no tenia como contratar mas gente asi que su esposa y sus hijos lo ayudan atender el restaunrante…. tiene peleas familiares y esta al borde del divorcio… trabaja todo los dias y encima el estafador lo acosa cuando puede… rompe publicidades del restaurante, busca meterse al restaurante sin permiso, etc.
Oswaldo, ¡es una historia de película! , y ya lo dice el dicho: «La realidad supera la ficción».
Cuando una persona propone un negocio y no está buscando que todos ganen, comienza a contar verdades a medias, a esquivar respuestas, a generar sospechas en vez de despejar dudas. ¿Cómo se puede invertir en algo de lo que no proporcionan la información esencial? Si en vez de pedir dinero adelantado para mostrar los números del negocio, el estafador hubiese pedido firmar un acuerdo de confidencialidad, hubiera sido más lógico y profesional.
Gracias por compartir esta historia, muchas personas van a leer tu comentario y van a guardar esta experiencia para tenerla en cuenta en futuros negocios.
Te dejo un cordial saludo,
Martín Omar
¡Una experiencia muy lamentable, pero muy buena la enseñanza!
Gracias por todas sus anécdotas y aportes.
Jorge H. González.
Medellín-Colombia.
Muy buen ejemplo Martin, ahi si queda bien la reflexion No todo lo que brilla es oro, hay que analizar y educarse financieramente para empezar de poco a poco con pasos firmes.
estoy empezando un pequeño negocio de renta de maquinas, espero que vaya creciendo con el tiempo. Ya veremos como se va desarrollando y les hare saber mas. gracias Martin.
Saludos, Eduaardo.
s
Estimado Martin, Gracias por ayudarnos a aprender cada vez un poco mas con cada articulo que publicas. Excelente. Saludos de Lima – Perú
buenas noches seguidores de nuestro consejero de negocios Martin, yo quiero comentarles mi experiencia por penzar en grande, hice una inversion muy riesgoza sin conocer el mercado de la musica, realice un evento musical con una inversion de mas de 100 mil dolares, de la cual perdi todo el capital de la inversion!!! yo por ser muy arrebatado para los negocios me paso esta mala experiencia y ahora me hace dificl salir adelante……
José Luis, bueno, tu experiencia es muy buena para el ejemplo, gracias por contárnosla. Quizás hoy tomarías las cosas de otra manera y a las generaciones futuras les dirías:
• Inicien promocionando eventos pequeños y a medida que van ganando experiencia, atrévanse a hacerse cargo de otros de mayor envergadura. (Y esto sería pensar en grande sabiendo cumplir cada etapa)
Otro consejo podría ser:
• Inicien promocionando eventos pequeños y cuando sientan que pueden manejar proyectos grandes, hagan un plan para que inversores aporten el dinero y de esta forma, sus riesgos disminuyan un 90% apalancándose en el dinero de ellos, a cambio de un posible porcentaje en las ganancias.
Saludos,
Martín Omar
Martin. Gracias por tu aporte a esta hermosa comunidad libropadrericopadrepobre. Moraleja. Hay que pensar en Grande pero Hay que empezar en Pequeño. Porque el conocimiento se convierte en PODER unicamente atraves de su organizacion y uso. Y al empezar en pequeño tenemos la oportunidad de aprender y si fracasamos no hay problema por que es pequeño el capital que arriesgamos. Saludos y hasta pronto.