Kiyosaki dice que la pasión es mezcla de ira y amor. Y esta historia nos muestra la pasión de un padre que desesperado por salvar la vida de sus hijas, comienza un emprendimiento arriesgándolo todo.
La vida de Jhon Crowley inspiró un libro y una película. Sinceramente, no es para menos. De un momento a otro, Jhon recibe la peor noticia de su vida. Su pequeña hija morirá a causa de una enfermedad en menos de 24 meses y su hermanito recién nacido heredó el mismo mal. Esta enfermedad está catalogada como “rara” porque se da en casos aislados y como “no hay cuota de mercado”, los laboratorios no invierten en buscar la cura. Algo bastante cruel.
La enfermedad de Pompe, como se la conoce, produce que el corazón se agrande de manera no natural y los músculos sufren problemas para desarrollarse. Un panorama completamente desalentador para cualquier persona. Definitivamente no creo que un padre en estas circunstancias tenga algún deseo de llevar adelante un proyecto de ningún tipo.
Parecía que su vida no podía ser peor, cuando una noche, su hija es internada de urgencia por un ataque producido por la misma enfermedad, ya su corazón tenía una proporción del doble de lo normal y aun cuando los médicos no le daban horas de vida, la pequeña lucho por salir adelante y pudo hacerlo. Pero los médicos replantearon su pronóstico, a Jhon no le quedarían dos años para compartir con su pequeña, era tan solo cuestión de meses.
Internet no le proporcionaba más esperanza de la que tenía, aunque había conseguido información de que en algunos países se habían tenido ciertos avances en el estudio de la enfermedad. Así fue como pudo ponerse en contacto con el Dr. Canfield, uno de los pocos que había avanzado algo en la búsqueda de la cura.
Hasta el momento, lo certero era que le quedaba poco tiempo para salvar a sus pequeñas, las empresas no invertirían en buscar un “antídoto no rentable”, y la persona que había logrado llegar un paso más allá del resto en la búsqueda de una posible cura, no contaba con los medios necesarios para realizar estudios más específicos.
El Dr. Canfield fue muy claro: ninguna compañía va a aportar dinero para este proyecto. Pero la respuesta de John fue la de un padre, la de un héroe, la de un emprendedor:
“Entonces, yo seré la empresa.”
Dejó su trabajo de abogado, vendió todo lo que tenía y formó Novazyme , una empresa de biotecnología. Contrató un grupo de médicos liderados por el Dr. Canfield e inició una empresa formada en amor y esperanza.
El tiempo se acababa, y los recursos también, algo era claro, necesitaban más profesionales y maquinaria de avanzada, necesitaban más presupuesto. Comenzó la búsqueda de su última opción, encontrar una gran empresa que invirtiera en su empresa. Luego de que le cerraran muchas puertas en la cara, cayó en la realidad que nadie le daría dinero por un proyecto que estaba basado en un tema personal. Si no podía demostrar que el negocio era rentable, no conseguiría el apoyo de ninguna corporación.
Llegó el momento cuando tuvo que gastar su “bala de plata”. Sin más que una oportunidad, cambió su discurso, y ocultando la enfermedad de sus hijos, vendió “el gran proyecto rentable” de su compañía a la mega empresa Genzyme Corporation por más de $200.000.000 de dólares. Y esta es la parte en donde alguien puede decir “el dinero no hace la felicidad” y no, no podía estar muy alegre porque aun sus hijas seguían sin su cura, pero tampoco el dinero lo puso más triste y por lo menos tenía un poco más de esperanza.
Genzyme Corporation siguió trabajando con el mismo grupo de médicos, con el Dr. Canfield y con Jhon Crowley como director comercial.
La pasión de Jhon, llevó a encontrar la cura para la enfermedad y no solo que salvó a sus hijas, sino también a miles de personas que mediante esta hazaña pudieron llevar una vida normal.
Luego Jhon Crowley dejó Genzyme Corporation para ahora sí, formar una empresa sin tener que pensar en la vida de sus hijas, pero pensando en la vida de los hijos de los demás. Dividió su compañía en dos grandes segmentos, uno que buscaría la cura de enfermedades consideradas “raras” y otra que produciría fármacos para las mismas.
La historia fue protagonizada por Brendan Fraser como Jhon Crowley y Harrison Ford como el Dr. Canfield (Dr. Robert Stonehill) en el film “Medidas extraordinarias” (2010 – Extraordinary measures). El libro que retrata la misma historia se llamó “La cura” (The cure).
¿Qué cosas pasaron por tu cabeza mientras leías esta historia?
Te dejo mis saludos,
Martín Omar
Muy buenas lección, empezaré a ser un emprendedor, con miras de apoyar.
Martin omar, gracias por tus mensajes, de verdad que son geniales y emprendedores, verdaderamente los bloqueos solo existen en nuestra mente y la mejor motivación son las dificultades que nos pone la vida y la mayor fuente de inspiración son nuestros hijos por quienes damos la vida si es necesario para salvar la suya. Muchas gracias
Gracias Martin me estás siendo de gran ayuda.He visto la película y creo que las grandes cosas en el mundo suceden gracias a personas muy pequeñas pero con gran arrojo y motivación. El amor mueve montañas.Empecemos el experimento de muchas por la meta que queramos conseguir con arrojo y decisión. Gracias de todo corazón
ok, me parece perfecta la historia ,pero que hubiera pasado si sus hijas no se estuvieran enfermas .
Muchas de las veces cuando te ves en la necesidad o en la adversidad suelen salir las grandes ideas, el cerebro se pone a trabajar.
Y principalmente con la ayuda de DIOS
Saludos.
Gracias Martin por esas historias tan conmovedoras y reales que Dios Todopoderoso te bendiga siempre por el trabajo que realizar a través de otras personas y de tus consejos. Muchas gracias
muy buena historia.!
somos muchos los que nos derrotams ante esas cosas pero muy poca gente saca lo mejor de eyos en esos momentos tan dificilis..
gracias por el tema
gracias por el grupo
gracias por apoyarnos (de vdd me ciento muy contento en este grupo estoy aprendiendo mucho)
saludos a todos
Muchas gracias por tus consejos, un saludo.
mucho valor y coraje para emprender algo de la nada, pero sobre todo su motivación «el amor hacia sus hijas» y lo mejor que al tener éxito lo compartio con los demás que tenían el mismo problema.
Excelente leccion de vida!!
Esto me recuerda una frase que dice «nunca sabes lo fuerte que eres, hasta que ser fuerte es tu única opción» Y en verdad en esta lección de vida queda mas que reflejado!
Y en este punto, no se si el personaje de la historia alguna vez antes tuvo el deseo ó la visión de crear una empresa; pero creo que no hay mayor motivacion para esto, que pensar en el bienestar de la familia para lograr lo que nos propongamos! En hora buena!!
Y un saludo al gran Martin!
Gracias por poner este tipo de recursos a nuestro alcance!!