No importa lo que vendas, sino cómo lo hagas.

No importa lo que vendas, sino cómo lo hagas.

Es muy común que en los proyectos le demos una excesiva importancia al producto, cuando este, es tan solo un elemento dentro de todos los que se necesitan para lograr tener éxito en los negocios.

En este artículo, cito varios ejemplos de productos casi ridículos que sin embargo, tratados con las estrategias de marketing adecuadas, fueron exitosos en sus ventas.

Imagina que nos encontramos para intercambiar ideas de negocios y te muestro mi listado de ideas, ¿qué dirías?

Mi listado de ideas millonarias.

• Vender piedras en cajas para regalo.
• Vender una pulsera de goma de $2 dólares a $30.
• Vender conciertos bien caros de un violinista que vi en la calle.
• Vender publicidad por internet, $1 por pixel hasta alcanzar $1.000.000 en una página que no tenga nada más que publicidad.

¿Dirías que mis ideas son geniales y que mis productos están condenados al éxito verdad?

¿Cómo que nadie nos pagará $30 por una pulsera de $2 dólares?, ¿y qué dices de las piedras?, ¡vamos! podemos venderle piedras en una caja a muchas personas, ¿seguro que no quieres ser mi socio? Ya sé, la idea que te interesó es la del violinista que vi en la calle, era realmente bueno, podemos cobrar un buen dinero para que las personas lo vean tocar. Supongo que tampoco aceptarás entrar en mi genial idea de vender publicidad en una página que solo tiene publicidad.

Ok ok, acepto que mis ideas no son de lo mejor, pero no es nada que el marketing no pueda solucionar.

El poder del marketing en las ventas.

No importa lo que vendas: 1.000.000 de píxeles.

No importa lo que vendas: 1.000.000 de píxeles.

Hace algunos años cuando internet comenzaba a cobrar vuelo, un estudiante universitario a punto de quedar en la calle por no poder pagar las deudas del alquiler, sorprendía a todo el mundo con su idea de “La página del millón de píxeles”.

Consistía simplemente en una página que solo tendría publicidad. A la unidad de medida más pequeña en que se puede dividir una página, se le llama píxel. Por lo tanto, creó una página de 1.000.000 de píxeles y comenzó a venderlos uno por uno por tan solo $1 dólar.

¿A quién le podía interesar estar en esa página?, a muchas empresas visionarias que sabían que esta idea cobraría “viralidad” en internet, que se propagaría con gran velocidad y que llegaría a tener millones de visitas. Era una idea tan loca como original y eso haría que muchos curiosos entraran por lo menos para ver las marcas que estaban en esa súper muralla de publicidad. Increíblemente este muchacho en menos de un año pasó de tener deudas a tener los bolsillos llenos de dinero.

 

No importa lo que vendas: Power Balance.

No importa lo que vendas: Power Balance.

En noviembre del 2010, futbolistas, tenistas, basquetbolistas, golfistas y varios deportistas famosos más, comenzaron a utilizar una “pulsera milagrosa”.  Bueno, al menos eso era lo que decía la empresa que fabricaba la pulsera de goma con un holograma.

Según los fabricantes, el holograma de la pulsera producía en el ser humano más energía, flexibilidad, resistencia y fuerza. Aunque no fue lo mismo que declararon un año más tarde cuando tuvieron que desmentir esta estafa tras comenzar a recibir demandas millonarias por “publicidad engañosa” ya que no tenían forma de comprobar certeramente los efectos que el producto decía generar.

A pesar de que esta campaña fuera un engaño, lo que quiero destacar es el poder de ventas del marketing. La idea no es utilizar esto para mentir, sino utilizarlo de una forma eficiente sin estafar a las personas.

 

No importa lo que vendas: Pet Rock.

No importa lo que vendas: Pet Rock.

En 1975, Gary Dahl se decidió a inventar la mascota que no requería de cuidado: una piedra. Una piedra no es una mascota, pero puede ser un regalo chistoso. Gary decidió fabricar una linda caja, con un poco de paja, la piedra y un manual de instrucciones graciosas sobre “Cómo cuidar a tu mascota piedra”.

La idea tuvo tanto éxito que en 6 meses Gary había vendido millones, aunque seguramente terminaron siendo regalos más que nada para hacer una broma, la realidad es que Gary tuvo una idea completamente descabellada, pero que le dio un toque creativo al aplicarle una cuota de marketing en la caja y el manual.

 

No importa lo que vendas: Joshua Bell.

No importa lo que vendas: Joshua Bell.

El 12 de enero del 2007, una persona se dispuso a tocar con su violín en una estación de subte (metro) en Washington, Estados Unidos. Luego de estar una hora tocando, su recaudación ni siquiera llegaba a los $50 dólares. Lo que ninguna persona sabía, era que esa persona era Joshua Bell, considerado uno de los mejores violinistas del mundo y que su violín, era un Stradivarius del año 1713, valorado en casi $3.500.000 dólares.

Las mismas obras, el mismo violín y el mismo violinista por el que muchas personas pagaban cientos de dólares para verlo tocar, estaba recibiendo una paga penosa por su talento. Una sola persona, que había ido a un recital del violinista lo reconoció en el metro y no podía creer que estuviera tocando allí. Este experimento, estuvo realizado por el diario Washington Post.

Cada uno de estos casos, nos demuestra que el producto no es lo único importante, a veces hay que saber venderlo de la forma adecuada, en el lugar y momento adecuado y la clave de todo esto se llama: Marketing.

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Te dejo mis cordiales saludos!
Martín Omar

Acerca de Martín Omar
Desde hace más de 14 años desarrolla campañas montadas sobre Internet orientadas al crecimiento de las ventas. Actualmente se dedica al Marketing Online, y a promover la Educación Financiera.