EDUCACIÓN, EXPERIENCIA Y EXCEDENTE DE EFECTIVO – Las «3 E» del Padre Rico

Las "3 E" del Padre Rico de Kiyosaki: educación, experiencia y excedente de efectivo.

Kiyosaki nos revela en su libro “Guía para invertir” una lección del Padre Rico donde habla sobre los distintos “niveles” de dificultad que existen al momento de realizar inversiones y la importancia de reconocer las exigencias de educación, experiencia y excedente de efectivo que requiere cada nivel. Pero como esta lección también se puede aplicar a cualquier emprendimiento que inicies, voy a hablarte sobre las “3 E”, aplicadas a tu propio negocio.

Formar una empresa o un emprendimiento exitoso desde cero es posible, siempre y cuando tengas bien en claro que hayas adquirido la capacidad necesaria para afrontar el nivel de dificultad que el desafío requiere. Si bien, siempre te quedará algo por aprender, es de gran importancia que reconozcas el momento preciso para saltar al próximo nivel.

Sin importar el negocio que inicies, para llevarlo adelante tendrás que saber que te exigirá contar con un cierto nivel en las “3 E” del Padre Rico:

• EDUCACIÓN (tanto académica como cualquier otra)
• EXPERIENCIA y
• EXCEDENTE DE EFECTIVO

Hay personas que tienen una tendencia a estudiar y no llevar a la práctica lo aprendido, logran un buen nivel de EDUCACIÓN, pero están faltos de EXPERIENCIA. Otras evitarían toda la teoría si les fuera posible, y pasarían directo a la práctica, es decir a la EXPERIENCIA. Pero carecer de cierta EDUCACIÓN les puede costar mucho dinero. ¿Reconoces algo de esto en tí?

Hay negocios que requieren contar con mucho excedente de efectivo, pero hay otros que no. Tienes que comenzar a entrenarte, por ejemplo, para reconocer cuándo un negocio requiere una inversión de 5 años para ser rentable y cuando requiere solo meses. Las grandes empresas, por lo general, piensan sus proyectos a largo plazo, por lo que saben que el nivel de excedente de efectivo que necesitan es grande, y también saben estimar la cantidad necesaria de dinero con la que tendrán que contar por los siguientes 5 años. Pero este caso de planeación a largo plazo puede que no aplique a una iniciativa más pequeña.

Lo malo es no tener en claro estas diferencias y por ejemplo, iniciar un negocio para darse cuenta a mitad de camino que el excedente de efectivo necesario era mucho más grande del que se esperaba, algo que quizás se hubiera podido evitar si hubiera existido una planificación más cuidadosa (algo que te lo puede dar la EDUCACIÓN O LA EXPERIENCIA). Así vemos como comienzan a unirse las “3 E”.

Este tema es muy muy importante, tanto que me animo a decir:

 “La mayoría de los negocios se van a la quiebra en los primeros 2 años por tener un desequilibrio en las 3 E.”

Quiero mencionarte unos ejemplos de por qué me animo a afirmar esto:

Una persona de unos 50 años que trabajó 25 en una empresa, renuncia. Con el dinero que tenía ahorrado, decide abrir su propio negocio, porque cree que el nivel de EXPERIENCIA que adquirió como empleado durante esos 25 años es el suficiente para conocer todos los secretos del negocio. Compra las maquinarias, contrata el personal y se dedica a manejar su empresa.

Pero no tarda mucho en darse cuenta que estuvo 25 años adquiriendo experiencia como empleado, no como jefe. Se da cuenta que no estaba del todo preparado para delegar tareas, le cuesta mucho comunicarse con sus empleados y peor aún, se da cuenta que no es bueno para tratar con las personas.

Llevar la contabilidad es más complicado de lo que creía y haber contratado a su sobrina para llevar los números de la empresa no fue su mayor acierto, ahora deberá contratar a un especialista y esto estaba fuera de sus cálculos.

Solucionar todos estos problemas requerirá de contratar más personal, lo que hará que suban todos los costos de su producto y quizás el negocio deje de ser auto sustentable y comience a dar pérdidas. Este emprendedor comienza a pensar que no estaba tan mal como empleado. Tantas complicaciones le están haciendo perder dinero y su salud comienza a verse afectada. Este no era el negocio que él tenía en mente, el planeaba trabajar menos y ganar más, pero era evidente que había planeado mal varias cosas.

En este ejemplo, vemos como la EXPERIENCIA del emprendedor era más teórica que práctica, y que cometió el error de no conocer a fondo el negocio desde la postura del dueño del negocio. Él conocía bien el rubro como empleado, pero no desde el punto de vista del creador del negocio. En este sentido, su experiencia era casi cero. Si hubiera tenido en cuenta esto antes, sabría que el excedente de efectivo con el que contaba no sería el suficiente.

La buena noticia es que la historia puede ser muy distinta para tí.

Supongamos que eres tú el que esta vez desea iniciar un emprendimiento.

Las palabras COHERENCIA y HUMILDAD son la clave para resolver muchos problemas. (Martín Omar)

“Hoy digo a menudo, «¿De qué forma haría esto Peter Lynch, o Donald Trump, o Warren Buffet, o George Soros?» La única manera que tengo de acceder a su vasto poder mental, es siendo lo suficientemente humilde como para escuchar o leer lo que ellos tienen para decir.” (Robert Kiyosaki)

Como te reconoces falto de experiencia en algunos temas, inicias tu etapa de educación. Te alistas a un curso llamado “cómo montar un negocio”. En donde te asesorarán para planificar: los números, los requisitos legales, el marketing y las ventas, el manejo de las personas y los proveedores.

El curso dura unos 3 meses, pero como sabes que te encuentras en la etapa de EDUCACIÓN, no lo ves como tiempo o dinero perdido, sino como una inversión, sabes que la información que van a proporcionarte es mucho más valiosa que el costo que pueda tener el curso.

Ya al segundo mes, comienzas a darte cuenta que el programa del curso exige que pases a la práctica (EXPERIENCIA) y te obliga a aplicarlo a tu emprendimiento porque los números que tendrás que calcular, tienen que ser los más reales posibles, por lo tanto comienzas a consultar precios de proveedores, a ver cuánto es el dinero que necesitas para pagarle a los empleados, etc.

Uno de los asesores del curso te dice que es importante que además de todos los gastos deberías sumar un % más de dinero para imprevistos, por lo tanto llegas al tercer mes con un plan de negocios armado, y con una base más realista y balanceada de EDUCACIÓN, EXPERIENCIA, Y EXCEDENTE DE EFECTIVO necesario. Eres más consciente de lo que estás enfrentando, y del dinero que necesitas para realizarlo. Puede, inclusive que sea más fácil de lo que imaginabas o que te abra los ojos a muchas cosas que si no fuera por este tipo de asesoramiento no te hubieras dado cuenta.

Otra de las claves en estos temas es la SIMPLEZA:

“Dado que sólo tenía 9 años cuando comencé, las lecciones que mi padre rico me dio fueron simples. Y cuando todo estaba expresado y realizado, quedaron definidas tan sólo seis lecciones principales, repetidas a lo largo de 30 años.” (Robert Kiyosaki)

El curso, seminario, o libro que adquieras, tiene que estar acorde a lo que puedas comprender en la etapa en la que estás. De nada te servirá adquirir cursos con un nivel tan avanzado que termines por no comprenderlos sin previamente obtener los conocimientos más básicos.

Por ejemplo, seminarios, libros y cursos sobre “Cómo armar un plan de negocios” hay miles, pero algunos tienen un nivel de complejidad tan avanzado, que terminarás por no planificar nada por frustración. Y lo peor es que te quedarás con la idea de que no eres capaz de armar un plan de negocios, y no es así. Si tu negocio es sencillo, que tu plan de negocios sea sencillo, y que el curso al que asistas para capacitarte, sea sencillo. Luego, podrás pasar al nivel si es necesario.

Y para cerrar, quiero compartir contigo unos párrafos de Padre Rico Padre Pobre, escrito por Kiyosaki:

“Y sepa que si usted aprende algo nuevo, le será necesario cometer errores en orden de poder entender plenamente lo que ha aprendido. (…) Las personas arrogantes rara vez leen o compran casetes. ¿Para qué los necesitarían? Ellos son el centro del universo. (…) En este caso, la así llamada «inteligencia» combinada con «arrogancia» es igual a «ignorancia». Una persona verdaderamente inteligente recibe bien las nuevas ideas, porque pueden sumar a la sinergia de las otras ideas acumuladas.”

Espero que este artículo te sea de utilidad!
Martín Omar.