Al momento de conseguir dinero para un negocio, es muy importante la estrategia que se utiliza, ya que el trabajo del inversor es desconfiar, rechazar ofertas a diario y asegurarse de que el proyecto en el que va a depositar su dinero, prosperará.
Para lograr que el inversor diga las palabras mágicas “me gustaría invertir en tu proyecto”, hay una táctica que consiste esencialmente, en la astucia de no pedir dinero.
«Si pides dinero, obtendrás consejos,
si pides consejos, obtendrás dinero».
Este título, es un dicho común entre emprendedores y tiene una justificación más que razonable:
El inversor está acostumbrado a que le quieran “vender” proyectos todo el tiempo, y su habilidad está en encontrar un negocio bueno, entre muchos malos. Esto lo entrena para tener el “no”, siempre preparado. Aunque el “no” de un inversor, es un bastante cordial. Seguramente no dirá: “tu proyecto no me interesa”, es más probable que en vez de eso, te dé un consejo:
“La idea es un tanto compleja, creo que sería bueno
que trabajaras un poco más en esta parte del plan de negocios.
Después lo podemos seguir viendo…”
El emprendedor fue en busca de dinero, y obtuvo un consejo (además gastó su única oportunidad ante el inversor).
La clave para conseguir dinero, sin pedirlo.
La técnica consiste en mantener el foco en obtener un consejo real, y olvidarse del dinero. Si un inversor te brinda de su tiempo para darte un consejo, y ve que el negocio puede ser rentable, no aguantará el deseo de ofrecerte su participación.
En cambio, si ve que realmente hay que ajustar algunas cosas, pero el proyecto le interesa, puede que quiera probarte pidiéndote que hagas ciertos cambios y lo vuelvas a ver, para seguir “aconsejándote”.
Aunque no consigas el dinero, este proceso de todas formas es muy bueno para ajustar los cabos de tu negocio. En el peor de los casos, obtienes una asesoría experimentada y no gastaste tu oportunidad de pedirle dinero a ese inversor, algo que puede servirte más adelante, en futuros proyectos.
Esta técnica, no durará de por vida con la misma persona, por lo tanto es bueno tener un plan b. Si las dos primeras veces el inversor te recibe para aconsejarte, quizás la tercera vez ya no quiera hacerlo, pero puede que esté abierto a escuchar una nueva propuesta de negocios a futuro, si la relación fue fluida en los encuentros anteriores.
Muchos buenos inversores ponen más foco en el emprendedor que en el proyecto, por lo tanto, puede que quizás el negocio no lo haya convencido, pero que haya visto potencial en la persona. Y eso es algo que deja abierta una gran puerta.
Conozco el caso de unos emprendedores que fueron a solicitar dinero para un proyecto, y les dijeron:
“El proyecto no nos interesa, pero vemos potencial en ustedes.
Tenemos otro proyecto muy bien estudiado que creemos que podrían llevar adelante.
¿Les interesa saber más de la propuesta?”
Puede que no haya sido la respuesta que esperaban obtener, pero fue una gran noticia para ellos, porque esa mañana habían salido de sus casas sin nada, y regresaron con el dinero para montar un proyecto, el apoyo de un grupo de personas con mucha experiencia, y un plan de negocio armado y muy estudiado por los inversores. Por supuesto, la respuesta de los emprendedores fue: sí.
Consejos a tener en cuenta.
Un inversor por lo general no quiere perder el tiempo. Que tu estrategia sea ir en busca de consejos no quiere decir que no tengas que ir bien preparado a esa reunión. De hecho, esa es una gran oportunidad para demostrar lo preparado que estás para llevar adelante ese negocio u otro similar.
El inversor debe ser seducido en todo momento, si no es por la propuesta, que sea por tu preparación, tu forma de trabajo, tu energía, etc.
Todo el dinero que no tienes, debería ser suplantado con capacidades y/o por la oportunidad del negocio que le estás presentando. En todo esto hay 3 componentes:
• El dinero.
• El negocio.
• El emprendedor.
“El inversor tiene el dinero, y lo que buscará es ver
si tú tienes alguno de los otros dos componentes”.
Es por esto que a pesar de ir a “pedir un consejo”, no debería ser un consejo para principiantes. Si la respuesta que estás buscando, la podrías haber conseguido con un poquito de investigación antes de ver al inversor, quiere decir que no hiciste muy bien tu tarea, y eso, una persona con experiencia lo nota a simple vista.
Es muy distinto presentarse con todo un trabajo de esfuerzo e investigación, a ir para preguntar aspectos básicos del negocio.
Tienes que ser muy coherente para poder reconocer en qué nivel te encuentras, respecto de la persona que tendrás en frente y respecto del proyecto que estás proponiendo hacerte responsable. Si estás en un nivel muy básico, puede que no sea el momento de ir a visitar a un millonario, quizás te convenga hacerle una propuesta de negocios más básica, en una escala más pequeña, a un pariente o amigo que haga de “inversor”, y luego de desarrollar algunos emprendimientos, con esa experiencia, sería más razonable ir por la entrevista del inversor experimentado.
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Espero que te haya gustado la estrategia de pedir un consejo, en vez de dinero, es muy versátil porque puede aplicarse tanto para reunir grandes montos de dinero como una pequeña suma.
Mi propósito, como siempre, es brindarte herramientas que te sirvan para tus futuros negocios. Puedes dejar tu comentario debajo.
Atte.
Martín Omar.
Excelentes consejos gracias. La verdad te da otra perspectiva de la forma en que ves las cosas
Gracias Martín!
Leí el artículo y crei por un momento que yo era el inversionista. Gracias por el artículo!
Gracias Martín por estos consejos, los voy a tener en cuenta cuando logre iniciar mi proyecto de negocio.
Excelente articulo, muy buena información.
Gracias por todo lo que entregas, no sabes cuan útil es.
exelente,exelente este conocimiento llego como anillo al dedo.Estoy iniciandome como empresario y como todo inicio tienes sus baches y se hacen necesarios los inversionistas,me queda una pequeña duda si inicio con algun inversionista cual vendria siendo la participacion en toma de desiciones teniendo encuenta que la empresa tiene sus reglamentos y pasos concretos a seguir muy importante porcentajes en las ganancias y parte que le corresponderia al inversor.
gracias por su atencion prestada
Miguel, creo que este artículo puede serte de utilidad:
Cómo funcionan las rondas de inversión.
Saludos,
Martín Omar.
HOLA MUY BUENOS los comentarios , sugerencia ,son buenas las frases de motivación que se colocan al comienzo, solo que esta la de Francisco Bernardone de Asis aunque impulsa no debería estar ya que el escogió la pobreza era un hijo de ricos y de buena posición, peor su elección fue vivir entre los pobres y no pegaría en nada con esta actividad , gracias y éxitos.
Hola Ricardo, interesante planteo.
Supongo que San Francisco de Asís habrá tenido sus razones para hacer lo que hizo y seguramente habrá sido una noble causa, más pensando en que muchos de los ricos de esa época se encargaban de hostigar a los pobres. Él seguramente sintió de parte de Dios hacer lo contrario a los ricos de esa época, renunciar a sus riquezas para estar del «lado» de los pobres o para compartir con los pobres lo que tenía.
Dentro de los recursos con los que contaba, habrá creído que esa era la mejor forma de promover su causa, dar un gran ejemplo. Pero yo creo que esa es solo una forma de hacerlo, hay otras formas de ayudar a los pobres, sin ir más lejos, seguramente él estaría más capacitado para manejar dinero que las personas pobres, quizás podría haber tratado de generar negocios que cambiaran la situación de las personas pobres. En vez de repartir 10 monedas de oro, generar con esas monedas un negocio que fuera una fuente de ingresos para los pobres y de que de esa manera pudieran tener ingresos continuos ganados por el esfuerzo propio. En fin, como dice el dicho, enseñar a pescar en vez de regalar el pescado.
De hecho bíblicamente solo dos personas fueron llamadas «amigos de Dios» y esas dos persona eran ricas y esas riquezas fueron dadas por Dios, simplemente porque estas personas no tenían el problema de avaricia.
El dinero es nada, un simple objeto. Las personas son las que vuelcan en ese objeto su propia codicia, y avaricia.
Yo soy de los que creen que se puede lograr riqueza, se puede llegar a la libertad financiera sin la necesidad de andar volviendo pobre a otras personas.
El mensaje de San Francisco de Asís creo que calaba duro en la época, era decirle en la cara a los ricos «son muy insensibles», la gente se moría de hambre y los ricos hacían banquetes de semanas, eso me parece un extremo de avaricia. No digo que el rico tiene que dar al pobre simplemente porque el pobre es pobre y el rico es rico, pero si encima que muchos se hacían ricos a costa de los pobres, después derrochaban todo el dinero, creo que eso es un extremo. Y ahí entiendo perfectamente a San Francisco de Asís. Aunque repito, él optó por utilizar un método válido, por la causa, pero para mi es un método entre varios que pueden haber.
Si San Francisco de Asís viviera en esta época y se cruzara con un rico que no se hizo rico a costa de los pobres y si además este rico está interesado en ayudar a los pobres, creo que lo vería bien simplemente porque no tiene nada de malo tener riquezas, ni siquiera tiene nada de malo para Dios.
Saludos,
Martín Omar.
Hola Martin.
Excelente documento para emprendedores principiantes.
Muchísimas gracias.
Horacio caicedo.